¿Eres más productivo por la mañana o por la noche? ¿Te ocurre que tu creatividad se dispara en una determinada franja horaria mientras que en otra no rindes lo suficiente?

La respuesta podría estar en tus ritmos circadianos, que determinan si eres una persona «búho» o «alondra».

Cronotipos: ¿qué significa ser una persona «búho» o «alondra»?

La idea de que algunas personas son más activas por la mañana y otras por la noche no es solo una percepción popular, sino que tiene base científica.

Los términos «búho» y «alondra» se refieren a dos cronotipos opuestos, es decir, dos tipos de personas que tienen patrones de sueño y vigilia muy distintos.

  • Las personas «búho» suelen ser más activas y creativas durante la tarde y la noche. Se sienten con más energía cuando cae el sol y suelen quedarse despiertas hasta altas horas. Esto significa que les cuesta más madrugar y tienden a ser menos productivas durante las primeras horas del día.

  • Las personas «alondra» son aquellas que se despiertan temprano y sienten un impulso natural de energía durante la mañana. Son más productivas a primeras horas, pero su nivel de energía tiende a disminuir a medida que avanza la tarde, y por lo general se acuestan temprano.

Ambos cronotipos responden a lo que se conoce como ritmos circadianos, los cuales regulan no solo nuestros patrones de sueño sino también nuestros niveles de alerta, el apetito y las hormonas.

Ritmos circadianos: la clave detrás de tu reloj biológico

Los ritmos circadianos son ciclos de aproximadamente 24 horas que regulan muchos de los procesos biológicos del cuerpo.

Estos ritmos están dirigidos por un «reloj biológico» interno, que responde principalmente a las señales ambientales, como la luz y la oscuridad.

Este reloj biológico está controlado por una parte del cerebro llamada el núcleo supraquiasmático, que se encuentra en el hipotálamo.

Este núcleo recibe señales de luz a través de los ojos y ajusta nuestro ciclo de sueño y vigilia en función de si es de día o de noche.

  • Durante el día, la luz reduce la producción de melatonina (la hormona del sueño), lo que nos mantiene despiertos.
  • Por la noche, cuando disminuye la luz, aumenta la producción de melatonina, lo que nos da la señal para irnos a dormir.

Sin embargo, lo que hace que cada persona tenga un cronotipo particular es la forma en que su reloj biológico responde a estos estímulos.

Los cronotipos «búho» y «alondra» son la manifestación más clara de esta diferencia en los ritmos circadianos.

¿Es un mito o tiene base científica?

No es un mito, tiene una base científica sólida.

Estudios han demostrado que las personas realmente tienen relojes biológicos diferentes, y esto puede estar influenciado por factores genéticos.

Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Surrey reveló que la variación genética en el reloj biológico puede determinar si una persona es más propensa a ser un «búho» o una «alondra».

Además, se ha observado que los niveles de hormonas como la melatonina y el cortisol (la hormona del estrés, que también regula nuestros niveles de energía) fluctúan a lo largo del día de manera distinta en personas con diferentes cronotipos.

Otro dato relevante proviene de un estudio publicado en la revista Nature Communications, que sugiere que hay más de 350 variantes genéticas que influyen en si una persona es más mañanera o nocturna. Estos estudios respaldan la idea de que, para muchos, el cronotipo no es una elección, sino que está en su ADN.

¿Cómo afectan los ritmos circadianos a los diferentes cronotipos?

Los ritmos circadianos no solo determinan cuándo nos sentimos más despiertos o cansados, sino que también influyen en nuestra productividad y creatividad y hasta en nuestro estado de ánimo.

Personas «alondra»:

  • Suelen alcanzar su pico de productividad entre las 8 a.m. y el mediodía.
  • Tienen un mayor nivel de energía durante las primeras horas de la mañana, lo que les permite concentrarse mejor y realizar tareas más complejas a esas horas.
  • A medida que avanza la tarde, su energía comienza a decaer, por lo que las tareas más sencillas se gestionan mejor en la segunda mitad del día.
  • Los estudios muestran que las personas alondra suelen tener menos problemas para adaptarse a un horario laboral tradicional y, en muchos casos, experimentan menos estrés asociado a la gestión del tiempo.

Personas «búho»:

  • Su nivel de alerta suele ser más bajo por la mañana, y alcanzan su máximo rendimiento a última hora de la tarde o incluso por la noche.
  • Las personas «búho» tienden a tener más problemas para adaptarse a un horario laboral de 9 a 5, ya que se sienten más activas cuando la mayoría está cerrando la jornada.
  • Algunos estudios han sugerido que las personas nocturnas pueden ser más creativas, ya que su cerebro está más activo durante las horas en que la mayoría de las personas descansan, lo que fomenta la resolución de problemas de manera más abstracta.
  • Sin embargo, las personas búho tienden a experimentar más alteraciones del sueño, lo que puede conducir a problemas de salud como insomnio o fatiga crónica si no se ajustan adecuadamente.

La pregunta del millón: ¿podemos cambiar nuestro cronotipo?

Aunque en gran medida los cronotipos están influenciados por factores genéticos, algunos estudios sugieren que podemos ajustar parcialmente nuestro reloj biológico. Esto es especialmente útil si una persona búho quiere adaptarse a un horario más convencional.

  • Exposición a la luz natural: Aumentar la exposición a la luz solar por la mañana puede ayudar a «adelantar» el reloj interno, lo que hará que te despiertes y te duermas más temprano.
  • Rutinas regulares: Mantener horarios regulares para dormir y despertar, incluso los fines de semana, ayuda a estabilizar los ritmos circadianos.
  • Control de la luz artificial: Evitar la luz de pantallas antes de dormir puede ayudar a los búhos a mejorar su calidad de sueño y ajustar su ciclo.

Sin embargo, cambiar un cronotipo completamente puede ser difícil y contraproducente, ya que se está intentando ir en contra de la naturaleza del propio reloj biológico.

Conoce tu cronotipo para mejorar tu bienestar y productividad

La clave para aprovechar al máximo tus niveles de energía y creatividad está en comprender tu propio cronotipo.

Saber si eres una persona «búho» o «alondra» te permitirá organizar mejor tus tareas diarias, adaptando tus horas de mayor productividad a las actividades que requieren más esfuerzo mental.

En lugar de luchar contra tu reloj biológico, lo ideal es trabajar con él. De esta forma, puedes maximizar tu rendimiento, reducir el estrés y mejorar tu bienestar general.

Al final del día, no importa si eres búho o alondra, lo importante es encontrar el ritmo que mejor se ajuste a tu vida.

Espero haberte ayudado con este artículo. Si crees que puede resultar interesante para alguien que conoces, siéntete libre de compartirlo. 

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